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Añade declaraciones de Van Dijk
Países Bajos cumplió con holgura (4-0) en casa contra Hungría, este sábado en la quinta jornada de su grupo de la Liga de Naciones de la UEFA, gracias a lo cual pudo garantizarse una plaza en los cuartos de final del torneo.
Dos penales marcados en la primera parte por Wout Weghorst (minuto 21) y Cody Gakpo (45+12) encarrilaron el triunfo, mientras que Denzel Dumfries (64) y Teun Koopmeiners (86) completaron el festín, en un partido que de entrada se vio marcado por una interrupción de algo más de diez minutos casi en los inicios por una indisposición del técnico adjunto de los húngaros, Adam Szalai.
Pasado ese susto, que disparó por unos minutos la preocupación antes de que pronto se pudiera reanudar el choque y de que las primeras noticias fueran tranquilizadoras, los neerlandeses consiguieron llevarse esta ‘final’, ya que ambas selecciones llegaban al duelo igualadas a 5 puntos.
Una victoria clasificaba a cuartos a cualquiera de los dos equipos. Habían empatado 1-1 en su duelo del pasado mes en Budapest, por lo que el vencedor en Ámsterdam se distanciaba con tres puntos más, a falta de una jornada, y ganaba la diferencia de goles particular respecto al otro.
Por ello, la sexta jornada será un simple trámite en un grupo A3 en el que Alemania, que dominó 7-0 a Bosnia-Herzegovina este sábado, se aseguró el liderato y donde el resto de posiciones también está ya decididas.
En el inicio del partido se disparó el nerviosismo cuando el árbitro español Jesús Gil Manzano detuvo el partido en el minuto 7 para permitir la intervención del personal médico por la indisposición de una persona del banquillo húngaro, que luego se supo que era Adam Szalai (36 años), exinternacional y actual ayudante del seleccionador Marco Rossi.
Se desplegó una lona blanca para cubrir el trabajo del personal médico y, después de diez minutos, Szalai, que en la Eurocopa en 2021 perdió también el conocimiento durante un partido por un golpe en la cabeza, fue evacuado, mientras público y jugadores aplaudían.
Gergö Szabo, jefe de prensa de la selección húngara, declaró poco después a M4 Sport que Szalai se encontraba “consciente” y “estable”, tranquilizando sobre su situación.
Después de hablar con los jugadores, se decidió la reanudación del partido unos diez minutos después del parón.
Justo entonces, Gil Manzano decidió acudir al VAR para revisar una acción ocurrido antes del parón y decretó un penal a favor de los neerlandeses, que Weghorst no desaprovechó (minuto 21 oficialmente, aunque realmente era el octavo de juego real).
Hungría se mantuvo en el partido en casi toda la primera parte, pero recibió un zarpazo mortal justo antes del descanso, en forma de otro penal en contra. Gakpo fue entonces el encargado de lanzar y acertar, para el 2-0 en el 45+12.
En el 64, Dumfries amplió la ventaja con una volea a pase de Gakpo y, con todo más que decidido, Koopmeiners cabeceó a la red el 4-0 definitivo, asistido por Dumfries, para enviar a Países Bajos, semifinalista de la Eurocopa este año, a la siguiente etapa del torneo.
“Hoy jugamos mejor por las bandas que en nuestro anterior partido contra ellos. Ganar por cuatro goles y que no nos marquen es estupendo”, celebró el capitán Virgil Van Dijk en declaraciones a la televisión NOS.
La celebración fue completa con el regreso a la Oranje de Frenkie de Jong después de catorce meses y de su calvario con las lesiones. Jugó algo más de una hora, sin problemas.
tba-dr/dam
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